25 años, se dice pronto, pero es un cuarto de siglo. 25 años llenos de experiencias hace que esta pareja se convierta casi en una sola persona. Nadie se conoce mejor como ellos dos. Una mirada, un gesto, y cada uno sabe lo que piensa y como se siente el otro. Es el triunfo del amor por encima de todo. El valor del equipo, de la amistad, de la complicidad. Y se merece una fiesta, una buena excusa para juntar a toda la familia y amigos. Y celebrarlo por todo lo grande.
Todo depende del tipo de fiesta que quieras organizar. Si es algo más íntimo o una celebración por todo lo alto invitando a todas las personas importantes en la vida de la pareja homenajeada.
Haz una lista de la familia y los amigos que a ellos les hará ilusión ver. Según la cantidad de invitados, podrás decidir el lugar donde celebrarlo.
El color de las bodas de plata es el plateado. Decora con colores plata, mesas, paredes, techos. Usa bandrines, cubiertos, manteles, platos, vasos, globos, números de 25, centros de mesa, decoraciones colgantes, caminos de mesa, figuritas de tarta, marcasitios... todo siempre en todos plateados, porque el plateado es el color que define el segundo máximo galardón, después de las bodas de oro, que seguro que también celebrarán dentro de 25 años.
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